MUFASA 6 año(s) y 3 mes(es)
simpático + tranquilo + reservado
NArANJA CLARo
Contacto con niños: ?*
Contacto con otros gatos: BUENO
Contacto con perros: ?
Contacto con personas: BUENO
Necesidades especiales: NO
Haciendo honor a su nombre, Mufasa es el rey León de todos los gatos de nuestra protectora. Le gusta sentarse en la cama más alta de todas y mirar desde allí todo lo que ocurre y todo lo que hacen los demás gatos cuan Mufasa observando su reino desde lo alto de la montaña. No solo actúa como un rey, sino que es todo un sabio. Nunca se pelea con los otros machos, es respetado y querido por todos y, además, es sumamente inteligente. Sabe perfectamente que cuando entramos a la zona con el trasportín es para llevarnos a algún gato al veterinario y no sabemos todavía cómo, pero desaparece y se esconde en algún lugar en el que nunca nadie ha podido encontrarlo.
Como buen sabio, Mufasa es cauteloso con las personas nuevas, pero una vez aprende a confiar en ellas muestra su gran corazón: Mufasa es un gato de naturaleza muy dulce que solo busca atención y caricias cuando ha establecido un vínculo contigo. Fue abandonado en el refugio cuando era un bebé junto con su hermana Ninfa, y desde el primer momento fue un líder natural en la protectora.
Quien adopte este majestuoso gato, tendrá que mantenerlo en el interior hasta que se establezca un vínculo. También sería preferible que viviera con otro gato con el que se lleve bien, ya que le gusta estar en compañía de otros gatos (¿cómo podríamos dejar al rey sin nadie sobre quién reinar?).
Mufasa necesita a una persona que esté dispuesta a invertir tiempo en ganarse su confianza y amor, pero una vez lo consiga tendrá lo máximo a lo que puede aspirarse: ¡El cariño, la protección y la lealtad del rey!
Gastos de adopción gatos : ADULTO 120€ / CACHORRO 60€ Todos los animales disponibles para adopción tienen microchip y pasaporte. Han sido probados para enfermedades comunes (Leishmania para perros, FeLV y FIV para gatos). Los animales adultos están completamente vacunados y castrados.* Hasta su total adaptación con niños pequeños la supervisión de un adulto es esencial.
